-¿Qué tienes para consolar la tumba,
Corazón insolente, corazón en rebeldía?
El fruto maduro pesa y se desprende .
¿Qué tienes para consolar la tumba?
-Tengo el caudal de haber sido.
-¿Qué tienes para soportar la vida,
Corazón loco, corazón pronto al hastío?
Corazón sin esperanza y sin deseo,
¿Qué tienes para soportar la vida?
-Piedad, por lo que ha de pasar.
-¿Qué tienes para despreciar a los hombres,
Corazón duro, corazón rompible?
¿Qué tienes para despreciar a los hombres?
¿Qué eres más de lo que somos?
-Capaz de despreciarme.
Marguerite Yourcenar (1903-1987)
Versión de Silvia Barón-Supervielle
Mari, Mari, Mari.
ResponderEliminarLa poesía sigue siendo el sustento de este blog de imágenes y palabras.
Gracias amiga por todo, un fuerte abrazo, cuidate mucho.
Te escribí un mail en respuesta.
GRACIAS DE NUEVO.
Para eso fue creado Natalia... para no olvidar la poesía que ya conocía y conocer nuevos maestros (consagrados o no). Las imágenes son -realmente- un acompañamiento y a veces son ellas las que me sugieren los poemas.
ResponderEliminarMail recibido :-))
Un abrazo
Como averigua uno lo que ha sido, lo que es??
ResponderEliminaranal??
no complicado, muy complicado , sin duda, por eso deseo ser simple para evitar complicaciones
saludos brujos¡
Yo también prefiero la simpleza, amigo, así cuando tengo momentos de cuestionar todo lo que hago o pienso,frente a los demás, puedo decir como Marguerite en su último verso que -al menos- soy: "Capaz de despreciarme"-.
ResponderEliminarBesos brujos :-)
como dice Santi, valdría la pena ser más simple y no cuestionarse tanto todo... pero entonces no seríamos nosotros
ResponderEliminarBesicos
Encarna
Tienes razón, amiga, no seríamos nosotros... con lo fáciles que son las cosas realmente, lo difícil es no complicarlas ¿verdad?
ResponderEliminarBesos y buen fin de mes (que nos queda una buena temporada de "currelo")
A veces somos "malos" y nos cuesta ver...!! por eso creo que nos castigamos en despreciar lo que hay al rededor.
ResponderEliminarUn gran poema aunque me ha costado pillarlo la verdad.
Un abrazo grande guapa